El pasado domingo pude ver como al fútbol vamos siempre los mismos y comprobar que algunos deportivistas no asistieron al partido de Riazor. Las causas las desconozco, pero las intuyo. Unos quisieron aprovechar los últimos días de sol en compañía de familiares y amigos, otros continúan de vacaciones y los terceros reflexionan si retirar sus respectivos carnés de las oficinas deportivistas.

Yo animó a unos y otros a retirar cuanto antes el pase para poder disfrutar de nuestro Dépor en la temporada entrante. Tendremos una buena excusa para tomar una cervecita con los amigos, daremos un precioso paseo de camino al estadio por la playa de Riazor y participaremos en tertulias futboleras con conocimiento de causa. Ya está bien de oír, no escuchar, las criticas de los que nunca asisten a Riazor. ¿Qué demonios hace uno en casa metido las tardes de los domingos?

Si el problema para hacerse con abono es económico, por los tiempos de crisis que vivimos, ruego se resistan a no ir al fútbol. Agudicen al ingenio de forma extraordinaria (es lo que se debe hacer en estas circunstancias), pero nunca dejen de ir al fútbol. Una buena treta, muy usada entre los más listos, es conseguir un amigo o conocido que cumpla solo dos requisitos, que no sea socio y que esté apuntado en las listas del INEN como parado. Esta manera te permite retirar un carné a su nombre y asistir al fútbol de la forma más barata posible. La grada elegida para estas víctimas de la crisis es la preferencia inferior, una buena grada. Los más pícaros, una vez empezado el partido, seguro que suben a una grada superior para ver el partido en una localidad de privilegio.

Por último, me gustaría despedirme comentando algo que ya apareció en esta columna en alguna ocasión y que ahora vuelve a brotar. Me refiero a la querencia de mucho esquirol a los colores blancos y azulgranas, ¿será complejo provinciano? Pensé que los Bebeto, Rivaldo, Fran, Mauro, Makaay, Djalminha y compañía habían abolido semejante plaga. ¿Por qué renegar de algo tan querido? Espero y deseo que aprovechando este parón liguero, los muchos deportivistas que se subieron al carro de los ganadores, reflexionen un poco. Forza Dépor

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