En más de una ocasión, les he comentado que cuando realizo mis grandes viajes anuales tengo una serie de “encargos” de mis amigos y lectores, de lo más heterogéneo y variopinto. Desde los “leños del mundo” (para quemar el 24 de junio en las famosas Hogueras de San Juan de La Coruña), a tierras, sales y arenas de muy diversos lugares del Planeta, pasando por piedrecitas, campanillas, imanes, billetes bancarios, periódicos, monedas, búhos, postales, fetiches, muñequitas, figuras de animales o de monumentos, etc. El último “cliente” que incorporé a mi larga lista de coleccionistas fue Pedro Puig, jefe de fotografía en “El Ideal Gallego” y querido ex compañero en ese periódico, que me encargó tierra y arena. Y para entregarle las botellitas en que las traje, de Armenia, Georgia, Azerbaiyán e Irán, lo invité a comer el pasado viernes en “El Rincón de Ger”, sito en la coruñesa Playa de Santa Cristina.
Y, al propio tiempo, invité al excelente tenor coruñés Quique Paz, a quien le di las piedrecitas que me había pedido de diversos lugares emblemáticos (por cierto, puso el acento en Persépolis) de esos cuatro países, así como botellitas con tierra o arena de los mismos. A destacar, dos piedras talladas de las que usan los musulmanes para rezar, que cogí en la Mezquita del Shah (Teherán) y en la Ciudad Santa de Qom (Irán). Como es natural, ambos quedaron encantados con mis regalos. Y como ese mismo día me había invitado mi gran amigo Quique Sanz, para celebrar su cumpleaños, “maté tres pájaros de un tiro”, al englobar los tres encuentros en uno muy animado y entrañable, al que corresponde la fotografía que ilustra esta información, en la que vemos, de izquierda a derecha, a: Alfonso Novelle, Pedro Puig, Quique Paz; Santy Blázquez, Manuel Facal, Enrique Tostado, Quique Sanz, y quien esto ha escrito. ¡Felicidades, Quique!. (Foto: Lajos Spiegel)