Si mi buen amigo Germán Pereiro Vázquez (prematuramente fallecido el 21 de julio del 2016) pudiese contemplarlo, se sentiría muy orgulloso al ver como lo que fue cafetería y restaurante de su acogedor “Hotel Santa Cristina” (hoy convertido en el pujante y acreditado restaurante “El Rincón de Ger”, por idea de su querida hija Ana) ha sido distinguido con la preciada y apreciada “Q” de Calidad Turística. Casado con Isolina Golán, el 1 de enero de 1992 inauguró Germán el “Hotel Santa Cristina”, que amplió y modernizó en el año 2000. A su muerte, su hija Ana se hizo cargo del emporio familiar y realizó una gran reforma, especialmente en la cafetería y restaurante, convertidos en “El Rincón de Ger” como recuerdo de su amado padre e inaugurado el 22 de febrero del 2017. Posteriormente, Ana y su madre, decidieron alquilar el complejo a la acreditada empresa hotelera “Grupo Alda”, que a su vez arrendó “El Rincón de Ger” a “Hostelería del Noroeste, SL”, integrado por Ángel Sánchez Caamaño y Alberto Taboada Rey, que son quienes lo llevan desde el 1 de junio del 2018. Ahora, en la fachada del establecimiento luce desde hace unas semanas una placa de metacrilato con esa distinción, y según consta en el correspondiente certificado “Este establecimiento ha sido certificado con la Marca “Q”, otorgada por el Instituto para la Calidad Turística Española, atendiendo al rigor y excelencia en la prestación del servicio”. Una distinción, desde mi punto de vista, más que merecida y que premia el buen trabajo desempeñado por Alberto Taboada y su esposa Estefanía Filloy (con quienes aparezco en la fotografía que ilustra esta información) y el soberbio equipo de colaboradores y profesionales de primer orden con que cuentan. Mi más cordial felicitación, con el deseo de que sigan por la buena senda actual. ¡Chapó!. (Foto: Lajos Spiegel)