White River (Sudáfrica), 19 de octubre del 2016
Hoy he dedicado el día completo a realizar un sensacional safari por el inmenso e interesantisimo Parque Nacional Kruger, que es el más grande de Sudáfrica. Por tal motivo tuve que levantarme a las 4 de la mañana, ya que una hora más tarde subí al moderno y potente 4×4 Toyota en el que realicé todo el recorrido. El Hotel Winkler, un excelente 4 estrellas con todos los servicios, amplia piscina, parque y jardines, nos dio un café y unas pastas antes de partir y una muy completa bolsa de picnic para desayunar en ruta. El día amaneció lluvioso y frío, debido a estar en una zona de altas montañas. De salida, iniciamos una larga, sinuosa y bastante pendiente bajada, algo complicada al estar una parte de la carretera en obras. Nuestro recorrido hasta el Parque fue por una zona bastante habitada, aunque la mayoría de las casas son más bien pequeñas, de modesta construcción y con los tejados de láminas metálicas onduladas, que suelen oxidar se fácilmente. Del hotel al Parque hay unos 30 kilómetros y tardamos media hora larga en llegar. Tras pasar el rigido control de la entrada, y cuando ya había dejado de llover, iniciamos el safari. Aclaro, a la vista de varios guasapos que he recibido (incluso me dijeron que no hiciera como el Rey Juan Carlos….) que no se trató de una cacería de animales salvajes, sino de un safari fotográfico. No se la de cientos de fotos que hice con mi cámara y con el teléfono móvil. Con esta información incluyo la del acceso al Parque Kruger. ¡Menudo trabajo me espera para visionarlas y seleccionar las que incluiré en mi libro de fotos!. El Parque es totalmente salvaje y natural, de una belleza extraordinaria. Inicialmente ocupaba 20.000 m. cuadrados, pero en la actualidad son nada menos que 36.000 m. cuadrados. Existe una gran red de caminos de tierra y solamente al comienzo hay un pequeño tramo asfaltado. Las fieras, animales y aves viven en total libertad y para no molestarles el recorrido en el 4×4 fue casi en silencio. Tuve la oportunidad de ver grandes manadas de elefantes y de búfalos (una nos obligó a esperar varios minutos al cruzarse en nuestro camino), jirafas, rinocerontes, hipopótamos, leones, cebras, antílopes, hienas, águilas grandes, jabalíes, ciervos, tortugas leopardo (por los colores de su caparazón), impalas, gigantescos termiteros…..Baste decir que hay una superpoblación de 17.000 elefantes, cuando lo recomendable es que no rebasen los 6.000 o los 10.000 como máximo. El terreno es bastante llano y las montañas próximas son de granito, con más de 500.000 años de antigüedad. La prolongada sequía está causando graves problemas y el Río Sabie, donde paré media hora, apenas lleva agua para los hipopótamos, búfalos y demás animales. Esperemos que no tarde mucho la lluvia. Pero es lo que hay….(Foto: Lajos Spiegel)
