Tras mantenerse en Primera, el R. C. Deportivo de La Coruña necesita una “limpieza a fondo”

En la primera vuelta de la Liga, el Deportivo de La Coruña nos hizo recordar al Súper Dépor. Sus números eran para volver a estar en Europa. Incluso llegó a empatar (2-2) con el Barsa en el Camp Nou, el At. Madrid no pasó de la igualada (1-1) en Riazor, y Lucas llegó a ser “pichichi” de los jugadores españoles y a codearse con Suárez, Cristiano, Messi y Neymar. Eliminados de la Copa por el Mirandés, de Segunda B, una segunda vuelta desastrosa por poco lo envía a Segunda División. Estuvo 13 jornadas (3 meses) sin ganar, con 19 partidos encajando goles. Solamente en 7 encuentros dejó de recibir algún gol, y fue el más goleado a balón parado. Sus únicos 4 triunfos en Riazor marcan la temporada con menos victorias en casa; mientras sus 18 empates en el torneo suponen un nuevo récord nacional en Primera. Las últimas 8 jornadas fueron paradójicas, ya que perdieron los 4 partidos de casa mientras empataban (1-1) en Vigo, Sevilla y Eibar, y ganaban (0-2) en Villarreal. Pero una vez salvados, se destapó toda la mierda acumulada en el vestuario, que salpicó a varios jugadores y al entrenador, Víctor Sánchez del Amo (con quien aparezco en la fotografía el día del partido contra el Madrid, que cerró la temporada). Entre unos y otros nos ofrecieron un espectáculo realmente bochornoso, que obliga a la Directiva a una “limpieza a fondo”. Por cierto que el portero internacional croata Pletikosa, en su despedida del Dépor y del fútbol profesional, aconsejó a Víctor que tenga más autoridad en el vestuario y que las divergencias no trasciendan fuera del mismo. Totalmente de acuerdo, Pleti, y mucha suerte en tu futuro. (Foto: Lajos Spiegel)