Desde el primer minuto de esta Liga se sabía que esta temporada tocaba sufrir, y mucho. Las previsiones vaticinaban llegar al final del campeonato haciendo números, algo que se está cumpliendo a rajatabla. Hoy, a falta de tres jornadas para el desenlace, las esperanzas de salvación apenas anidan en el corazón de los deportivistas más recalcitrantes. Una cuestión de Fe que pone a prueba a la inquebrantable afición blanquiazul.
Los dos últimos descensos se fraguaron en condiciones bien distintas. Entonces el equipo dependía de sí mismo y terminaba la competición jugando en casa ante rivales a los que vencer entraba dentro de lo posible. Sin embargo las cosas se torcieron y acabaron como todos sabemos. Esta temporada conviene llegar a la jornada final con los deberes hechos porque enfrentarse en el Nou Camp a un Barcelona que posiblemente se esté jugando el título, parece imposible. En fin, seguro que hay misiones más difíciles pero esta se las trae.
La web deportivista Riazor.org publica esta semana un informe estadístico donde se analizan las probabilidades de salvación del cuadro coruñés. Básicamente se llega a la siguiente conclusión: el Depor tiene un 25% de probabilidades de mantener la categoría.
El estudio incluye varios supuestos. Si el equipo es capaz de sumar 6 puntos las probabilidades de mantenerse se disparan al 90%. Este dato invita al optimismo pero para ello hay que ganar en Bilbao y rematar el trabajo en casa con el Levante. Conseguir el pleno de triunfos –victoria en Nou Camp incluida- lo aparcamos en el terreno de las hipótesis increíbles para no comprometer la estadística como disciplina científica.
Si se consiguen 4 puntos, las opciones de renovar a categoría descienden al 20%, y con 3 las probabilidades bajan al 5%. Con menos de tres, las posibilidades de éxito son remotas (1%).
Estadísticas al margen y con el corazón en la mano, podemos pensar que el Athletic no se juega nada en esta Liga y su única preocupación será evitar posibles lesiones que mermen al equipo para afrontar la final de Copa contra el Barça el próximo 30 de mayo. Tampoco es descabellado imaginar que el Levante certifique su permanencia este domingo ganando a un Atlético en horas bajas, lo que le haría llegar a Riazor sin la presión de los puntos.
Toda esta serie de resultados cabe dentro de lo posible pero pensar que el Depor gane dos partidos seguidos (sólo ha ganado 6 en 35 partidos) es lo que más cuesta imaginar.
Si en otras ocasiones lo tuvimos más o menos encaminado y fallamos en las últimas jornadas, esta vez lo tenemos mal desde el principio. Lo peor es que el equipo no invita al optimismo. Lo dicho, encomendémonos a la Fe deportivista para este tramo final de Liga.
pgarcia_ramos@hotmail.com