Mi opinión sobre O avó es que el trazo experimentado que vemos en esta obra se deja llevar por unos pinceles que muestran la pasión y amor que la artista muestra en su querencia por los retratos. El gesto rudo del retratado se convierte en placido gracias a la luz y las formas que consigue pincelando unas curvas que le dan efecto dinámico al personaje. La obra me parece redonda de iluminación, con juegos de sombra encantados y mirada centrada, ojos profundos y el color de fondo que nos marca el perfil de la silueta. La obra en su conjunto nos cuenta algo sobre la vida O avó, sus manos fuertes, su tez, su gorra y esas ropas abrigosas nos hace volar la imaginación hacia lugares concretos.