Ayer les informaba del inicio de mi “Primera prórroga” vital, tras una delicada pero excelente operación de colon que el Dr. Sáez (Luis-Ángel González Sáez, con quien aparezco en la primera fotografía) me realizó el pasado 30 de diciembre en uno de los estupendos quirófanos del Hospital Universitario de La Coruña (CHUAC).
Semejante circunstancia me obligó a “despedir el año” 2013 de un modo nunca vivido hasta ese momento: en la sala de Reanimación, donde recuerdo el exquisito trato y las atenciones que me prodigaron el cirujano Dr. Antonio Toral, la enfermara Begoña Antromera, y el resto del personal de ese departamento.
Ya de regreso a la habitación 1081, en la que me acompañó durante cuatro días el ex futbolista profesional y exportador de pescados Quintela (Luis Sánchez Quintela), recibí las visitas de los cirujanos Dres. Pablo Concheiro y Perico de Llano; pero, especialmente, la de mi querido cirujano el Dr. Sáez (quien por cierto al día siguiente de mi operación fue abuelo por vez primera, por lo que le felicité muy afectuosamente) y su joven y valiosa ayudanta la Dra. Dora Gómez Pasante.
Es de justicia, y así lo hago y subrayo, resaltar la calidad de las modernas instalaciones y materiales, pero sobre todo el personal de todos los servicios del “CHUAC” (antiguo Juan Canalejo), desde los médicos a las enfermeras, auxiliares, personal de limpieza, etc. Todos, todos, merecen un “Sobresaliente cum laude”. Y así se lo hice saber a las “Gentes del CHUAC”, que son uno de los casi cinco mil contactos que tengo en “Facebook” diseminados por todo el mundo.
También debo citar a mi querida Dra. Ángeles Castro, quien en un análisis de control semestral, realizado el 11 de septiembre del 2013, detectó ciertas anomalías. Y de esa certera percepción, a la colonoscopia que en el Hospital Avente y Lago me realizó el Dr. Jesús Yáñez López, quien con un expresivo e informático “cortar y pegar” sentenció el resultado de la prueba.
A los diez días de la operación acudí al Ambulatorio de San José; donde, a la vista de la excelente evolución de la larga y profunda incisión, las expertas manos de la enfermera Mercedes Duque me extrajeron de una tacada los 34 puntos externos (grapas) que en larga vertical pasaban sobre el ombligo, recordatorio perenne del cordón umbilical con el que inicié mi andadura vital.
Superado positivamente tan delicado trance físico, me reuní con mis hermanos: Tito, Emilio y Marika (con los que aparezco en la segunda fotografía)iniciando la que denomino “Mi primera prórroga vital”, y de acuerdo con lo postulado en mi último libro seguiré “Fedellando…mientras el cuerpo aguante”. ¡¡Va por ustedes, mis muy queridos amigos y lectores!!!.(Fotos: Lajos Spiegel).
2 comentarios en “Sobresaliente para el personal e instalaciones del Hospital Universitario de La Coruña (CHUAC)”
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Todo lo bueno que se diga sobre las gentes, instalaciones y servicios del CGUAC es más que merecido.
Todo lo bueno que se diga sobre las gentes, instalaciones y servicios del CGUAC es más que merecido.