El pasado domingo, viendo el partido televisado del Zaragoza-Dépor en el Mesón del Toro, mi gran amigo e Ilustre abogado Augusto Pérez-Cepeda Vila buen conocedor de Pamplona, ciudad donde se licenció, y del Osasuna, próximo rival liguero en Riazor, comentó que la palabra Osasuna en vascuence significa buena salud, fuerza o vigor. Como anillo al dedo le viene esta descripción a su entrenador el murciano José Antonio Camacho Alfaro y a su inseparable segundo Pepe Carcelén. Camacho tiene como jugador un palmarés impresionante con Ligas, Copas de España, Supercopas de España, Copa de la Liga, Copas de la UEFA, y probablemente hubiese sido centenario de la selección española si aquel fatídico 5 de enero de 1978 (estos días hizo ya 31 años) entrenando en la ciudad deportiva del Real Madrid, no hubiese sufrido la rotura de menisco y ligamentos cruzados que le tuvo fuera de los terrenos de juego dos años y que le impidió ir al mundial de Argentina. Kubala le había hecho debutar con 19 años. Además de ser un gran lateral izquierdo y un ejemplo de pundonor fue un excelente marcador. Fueron famosos sus marcajes a Cruyff y Maradona, los mejores jugadores de la era moderna. Como entrenador, aunque entrenó al Rayo Vallecano, Español, Sevilla, Selección Española, Benfica, Real Madrid (con espantada incluida), sólo tiene un titulo, una copa de Portugal.
A otro que le viene como anillo al dedo la descripción de salud, fuerza o vigor es al exdeportivista y uruguayo Walter Gerardo Pandiani Urquiza más conocido como “El Rifle”, que vuelve a Riazor vistiendo la camiseta del Osasuna después de haber jugado en el Birmingham City, en el R.C.D. Español y Mallorca. Como recuerdo del uruguayo nos quedamos con sus tres goles en la remontada histórica del Deportivo de La Coruña contra el París Saint Germain, quizá su mejor partido como blanquiazul, correspondiente a la segunda fase de la UEFA Champions League 2000/2001. Con un 0-3 en contra, el Deportivo sacó garra y acierto y, gracias a un gol de Diego Tristán y un hat-trick de Pandiani, acabó vencedor, convirtiendo Riazor en una auténtica fiesta comparable a la del histórica noche del 4-0 al Milán. Como curiosidad, hay que resaltar que aquel día el PSG tenía en el banquillo al exdeportivista Madar y al excéltico Lucin.
Tenemos que recibir al equipo con una sonora ovación que, a buen seguro, ayudará a nuestro querido Deportivo a mantener la regularidad y acabar la primera vuelta en puestos europeos. Se lo merece.
Artículo publicado en el diario deportivo gallego DXT Campeón el 7 de enero de 2010.