Dudo que el Depor esté cerca de los puestos de descenso por culpa de los árbitros. También dudo que las protestas desde todos los estamentos del Club hacia los colegiados hayan tenido un efecto positivo en el desarrollo de los partidos. Y dudo mucho más que exista una confabulación de los trencillas con el propósito de que los coruñeses pierdan la categoría. Por eso me parece infructuoso cargar contra los árbitros todas las semanas en las que el equipo pierde.
Repetir esta idea subjetiva de manera absurda y obsesiva solo conduce a estados paranoicos que debilitan el estado anímico de jugadores y afición.
Siempre es bueno rebobinar los últimos partidos para tratar de buscar algún método objetivo que pueda explicar la situación del equipo.
Tomamos como muestra los últimos cinco partidos. En la jornada 11 el Depor tenía ganado el partido hasta que a diez minutos del final empata el Granada. Sólo en la jornada 14 fue capaz de vencer con absoluta claridad a la Real Sociedad en lo que se empieza a conocer como el “partido de la temporada”, donde los blanquiazules parece que bordaron el futbol. Es en las jornadas 12, 13 y 15 cuando se pierde en los minutos del descuento ante Sevilla, Málaga y Real Madrid; una hecho constatable que se repitió en varias ocasiones en unas semanas.
¿Mal arbitraje? ¿Mala suerte? ¿Falta de concentración en los últimos minutos? ¿Mala gestión técnica? ¿Decisiones erróneas desde el banquillo? Bueno, cualquiera de ellas puede aplicarse a un partido pero en cualquier caso sería bueno analizar de forma sosegada y menos emocional la manera de perder los encuentros en los minutos del descuento.
Cada aficionado encontrará razones para explicarse el desenlace de estos partidos pero deben de ser los jugadores y el cuerpo técnico quienes analicen el desarrollo de esos últimos minutos: la posible desconexión y/o falta de concentración de los jugadores, la idoneidad de los cambios que se producen con el marcador a favor, o incluso cuestiones de índole psicológica que podrían tener que ver con los nervios y miedos a ganar. En cualquier caso, no estaría de sobra tratar de buscar soluciones en el seno de la plantilla y dejar de desviar la atención a otros factores.
@pgarcia_ramos