Aunque no se puede hablar propiamente de un “derbi”, se le aproxima bastante. Me refiero al partido de fútbol de Segunda División nacional que disputarán mañana, en el coruñés Estadio de Riazor, a partir de las 17,30 horas, el Real Club Deportivo de La Coruña y el Club Deportivo Lugo. Será la segunda oportunidad en que estos equipos coinciden en Segunda División, tras haberlo hecho en la temporada 2013-2014. En esa ocasión, no hubo vencedores ni vencidos, ya que mientras los de las milenarias murallas romanas lograban un meritorio empate a cero goles en el Estadio de Riazor, el Real Club Deportivo de La Coruña igualó a dos goles en su posterior visita al “Ángel Carro” lucense. Además, es de subrayar que la coexistencia de sus aficiones no tiene nada que ver con la azarosa y follonera de los seguidores del Real Club Deportivo de La Coruña y el Real Club Celta de Vigo. De hecho, no existe prácticamente rivalidad entre los hinchas de Lugo y La Coruña, algo parecido a lo que sucede entre los del Deportivo y el Sevilla. En esa favorable circunstancia de relaciones coruñesas-lucenses influye, sin duda alguna, el hecho de que desde hace años han sido muchos los jugadores que salieron de la cantera herculina para integrarse en el principal equipo de Lugo. El encuentro Deportivo-Lugo de mañana es un partido con “mucho Tino”. Me refiero a que así se llaman los amigos y presidentes de ambos Clubes, a los que retraté hace algún tiempo cerca de mi casa en la coruñesa Playa de Santa Cristina. Nos encontramos, también, ante un partido con “buen tino”, dado el buen rollo entre ambos Clubes y sus seguidores. Y aunque sus respectivas posiciones clasificatorias son netamente favorables al Deportivo, no debemos descartar las opciones del Lugo para lograr algo positivo. Lo que más deseo, es que los Reyes nos traigan un buen partido. (Foto: Lajos Spiegel)