Al igual que en los años precedentes, mañana domingo, día 14 (coincidiendo con el 230 Aniversario de la Revolución Francesa, hito histórico que supuso un antes y un después en la historia mundial), celebraré la comida de mi cumpleaños. Lo haré en el acreditado restaurante “El Rincón de Ger” (cuyos dirigentes y personal aparecen en la fotografía), sito en la Playa de Santa Cristina (La Coruña), concretamente en la Avenida de las Américas, que es la misma calle en la que vivo yo. Pese a encontrarnos en plena época vacacional, y a coincidir además en día festivo, estaré arropado por medio centenar de familiares y amigos de todo rango y condición. Por cierto, a todos mis invitados les pongo una condición única e inapelable: no quiero ningún tipo de regalo, ya que me siento muy bien “pagado” con su grata compañía. Se me ocurre pensar que es muy probable que yo sea uno de los pocos mortales que celebra dos veces su cumpleaños dentro del mismo año; ya que, además del mencionado 14 de julio, también celebro otro “nacimiento” el 30 de diciembre. Pero a esa segunda festiva conmemoración la denomino “Aniversario vital”, porque fue en la víspera del final de año del 2013 cuando logré superar exitosamente una importante intervención quirúrgica, realizada en el Hospital Universitario de La Coruña (CHUAC) por el excelente equipo encabezado por el Dr. Luis González Sáez, quien desde entonces es uno de los “fijos” en mis fiestas cumpleañeras. Y aunque no admito regalos, debo mencionar que en anteriores ocasiones conté con un concierto del violinista brasileño Anderson Quintiliano, las canciones de ópera de la soprano cubana Lis Teuntor; y el regalo del vals “Roberto L. Moskowich. Viajero sin fronteras”, que compuso para mí el gran músico betanceiro Paco Casal. Tal cual, se lo cuento. (Foto: Lajos Spiegel)