El pasado viernes (13 y, además, año bisiesto), justo el día antes de que el Gobierno de España decretara la Alerta Nacional a causa del maldito coronavirus, con el consiguiente cierre de todos los espacios públicos (salvo centros de alimentación, farmacias y quioscos), tuve el placer de comer con mis buenos amigos el Dr. Luis González Sáez (cirujano que me operó exitosamente, hace más de seis años, de cáncer de colon) y Carlos Brea “El bigotes”, escritor, actor y gastrónomo.
El distendido y largo encuentro culinario, al que corresponde la segunda de las fotografías que ilustran esta información, tuvo lugar en “El Rincón de Ger”, acreditado restaurante sito en la coruñesa Playa de Santa Cristina, muy cerca de mi residencia. Como era viernes, el plato principal fueron espaguetis boloñesa, que desde hace bastantes años como siempre ese día, en recuerdo de mi fallecido buen amigo Germán Pereiro. Otras viandas y exquisitos postres merecieron encendidos elogios de mis compañeros de mesa, a quienes presenté a Santiago Fernández Torres, que así se llama el cocinero que preparó esos manjares.
Santy Fernández (con quien aparezco en la primera de las fotografías) nació el 1 de enero del año 1982 en La Coruña, ciudad donde estudió las primeras letras, concretamente en el selectivo Colegio Peñarredonda, tras haber estado en parvulitos en Lugo, donde estaba destinado su padre que era Jefe de Zona de la firma “Saprogal”.
Posteriormente, del 2000 al 2002, estudió Cocina en la magnífica Escuela de Hostelería San Javier, en La Coruña, cuyo Director era mi amigo Francisco García, a quien cariñosamente llamaban “Hommer”.
Después estuvo trabajando de noche y muy contento, como camarero, durante dos años, en la famosa discoteca “Mobby Dick”, en la ciudad de Sada (La Coruña), cuyo propietario era el popular Nito Pena, padre de mi buena amiga Almudena, que fue concejala de Cultura del Ayuntamiento de Sada.
En el año 2004 Santy decidió cambiar de aires. Dejó su Galicia natal, y se fue de cocinero al “El Ermitaño”, famoso establecimiento de Benavente (Zamora) que tiene una Estrella Michelin. Comenzó con repostería aplicada al restaurante, y siguió con el resto de las partidas de la cocina, entrantes fríos y calientes, etc.
Dos años más tarde, se marchó a Toro (Zamora), como cocinero del restaurante “Lera”, un establecimiento que estuvo nominado a Estrella Michelín y que se trasladó a Castroverde del Campo, pueblo de donde era Alcalde el padre del propietario. Estaba enfocado al vino y a la cocina de la tierra, pero con vajilla específica y cocina al punto, muy buena.
Un año más tarde “pasó el charquito” y se fue a Menorca, contratado como cocinero del “Tápera” (nombre catalán que significa alcaparra), un restaurante de prestigio que estaba asesorado por la Escuela Hoffman, de Barcelona. Era una cocina muy localista, pero con elaboración con mucho volumen y productos de alta calidad, entre los que sobresalían las buenas piezas de pescado y los mariscos.
Con el fin de disfrutar de la nieve de los Pirineos, se fue a la famosa Estación de Esquí de Baqueira Beret, pero como no había trabajo como cocinero trabajó de camarero en el popular restaurante “1800”, llamado así por la altura a la que se encontraba, y guarda muy buenos recuerdos de su paso por ese local.
Pero como lo que realmente le gusta a Santy es la cocina, volvió a los fogones de Menorca, donde hizo la temporada de verano; y luego regresó un par de años a “El Ermitaño”, pasando por todas las partidas de la cocina.
En el año 2010 volvió a La Coruña, concretamente al restaurante del Monte de San Pedro, pasando luego a la “Estación de Cambre”, con Beatriz Sotelo y Xoán Crujeiras. De allí se fue al Hotel Sada Marina, cuando tenía cuatro estrellas; y, tras un breve descanso, estuvo en “Pazo Libunca”, en Río do Pozo (Ferrol).
De nuevo volvería a La Coruña, aterrizando en el “Lebón” de la Plaza de Vigo, donde permaneció casi dos años con su cocina fusión e internacional, hasta que pasó a “El de Alberto”, en Monte Alto, local recomendado por Michelin y con un Sol Repsol, donde estuvo un año.
Tras pasar casi un año como jefe de cocina del “Decanta-te”, en Sada, restaurante asesorado por el “Estación de Cambre”, en junio del año 2019 se incorporó a la cocina de “El Rincón de Ger”, en la coruñesa y turística Playa de Santa Cristina, donde lleva una trayectoria culinaria muy exitosa y repleta de alabanzas, cosa de la que doy fe, contando con el aval de los numerosos amigos que me acompañan en las dos grandes celebraciones de mi cumpleaños y aniversario vital, amén de otras muchas ocasiones…. Tal cual se lo cuento. (Foto: Lajos Spiegel)