Artículo de Fede G. Poncet en DXT Campeón el pasado julio día 28 de agosto de 2013.
Antes de profundizar en la actualidad del Depor me gustaría dedicar unas letras a modo de rendir un sencillo y emotivo recuerdo en memoria a las victimas desaparecidas en el tormentoso accidente ferroviario ocurrido en Santiago de Compostela el pasado miércoles. Estamos tristes pero muy tristes, pero en honor a la memoria de los que no están con nosotros seremos fuertes muy fuertes, pues la vida sigue. D.E.P. las víctimas de esta catástrofe y mis más sincero pésame a sus familiares y amigos. Como la vida continua, no nos queda otro remedio que seguir adelante y volver a la rutina. .
Comentar que entre unas cosas y otras la pretemporada deportivista está pasando totalmente desapercibida para la mayor parte de la afición. Cualquier tema de conversación entorno a nuestro querido Real Club Deportivo de La Coruña se centra mayoritariamente en el dichoso tema del concurso, la deuda, los administradores, hacienda, acreedores, etc. También nos acordamos de la AFE y LFP, en fin todo en la misma dirección que parece el cuento de nunca acabar.
Todos tenemos el corazón en un puño a la espera de la llegada de buenas noticias, pero las misma se hacen esperar y lo único que tengo claro es que no llegan pero se les espera.
También es curioso comprobar como una parte importante de la parroquia blanquiazul desconoce que la pretemporada ya no se celebra en Villalba, y que en la puesta de largo del equipo en Riazor tendremos como invitado especial al Real Madrid que jugará en La Coruña sin cobra un duro. En fin, por fin una alegría en casa del pobre.
Si preguntamos sobre los rivales y resultados de los partidos disputados en el mes de julio comprobaremos que muy pocos tienen información, a la vez que casi nadie conoce a los integrantes de la plantilla. Estas cosas denotan que la principal preocupación de la familia deportivista es la de evitar la desaparición del club y el descenso de categoría por impago a los jugadores.
Ahora se dice que el juez sustituto tendrá que abandonar su plaza y volver a sus labores de docencia en la Universidad, que los acreedores presentaran un plan de pagos, que los jugadores quieren asegurarse el cobro de cantidades adeudadas hasta la última peseta. Y para más desgracia que las empresas del Grupo Depor pasan por una dura situación económica.
Aquí nadie sabe nada o por lo menos si lo saben no lo cuenta, todos andan como el perro y el gato y son incapaces de firmar un acuerdo viable para continuar en la lucha, esperemos que de una vez por todas el Deportivo, administradores, acreedores, jugadores y jueces lleguen a un acuerdo por el bien de un histórico del fútbol nacional.
La verdad es que pasan los días y en contra de mi voluntad no me queda más remedio que ponerme en la situación más pesimista, pues aunque llevo meses creyendo en la salvación llega un momento que uno desconfía.
Supongo que en mi bajo estado de ánimo hay secuelas de la angustiosa catástrofe ocurrida estos días pasados, pero la verdad es que lo veo todo muy oscuro y nadie hace nada para hacernos ver luz al final del túnel. ¡Forza Depor!