Hace unos días asistí a la inauguración de la soberbia exposición de pintura que la Asociación de Artistas Plástico Galegos (ARGA) nos ofrece, hasta el día 28, en recuerdo del pintor Tino Poza. El local, sito en la coruñesa calle de San Andrés, estaba materialmente abarrotado, e incluso había gente en la acera porticada a la entrada de la galería. Entre los numerosos asistentes estaba la viuda del malogrado artista, Bea Souto, y sus hijos Luis y Roi. Abundaban los colegas de Tino Poza, significados republicanos y socialistas, pero eché en falta algún representante municipal o provincial….El acto fue presidido por Francis Marrouch, presidente de “ARGA”, institución de la que Tino Poza fue durante muchos años uno de sus más importantes pilares, y del que se recordó esa faceta así como la de Concejal de Culleredo, responsable de Cultura en la Diputación Provincial de La Coruña, y su decisiva labor en los exitosos “Encuentros en Mariñán”. En la presentación de la magnífica muestra, compuesta por un total de 22 obras cuyos precios oscilan entre los 250 y los 495 euros, también intervinieron Pedro Bueno, Manuel Gandullo, Paco Ascón y Carlos Pereira, quienes glosaron certeramente la figura y la obra de Tino Poza. Y como magnífico complemento de este emotivo acto, Pablo Bouzas declamó unos poemas de su autoría, y Carmen Torreiro nos deleitó con sus sentidas interpretaciones como cantante. Aunque nacido en Vigo (Pontevedra), en 1954, desde los dos años de edad Tino Poza vivió en La Coruña y Culleredo, y siempre hizo honor y causa de su ascendencia republicana. Él mismo se consideraba autodidacta, tanto en lo artístico como en lo político, a la vez que un creador en todas sus actividades. Pintor expresionista y surrealista, destacaba especialmente por su forma de realizar los retratos y reflejar las emociones.(Foto: Rafa Magán)
