(Fuente: María Varela La Opinión A Coruña) El culebrón parece que tiene los días contados y que las aguas volverán a su cauce. El Liceo, sancionado un año sin competir en Europa por no haberse presentado a la Supercopa contra el Benfica -decisión a su vez propiciada por la irregular designación de la sede y los árbitros de la final-, podría ser perdonado por la Asamblea de la CERS (Confederación Europea de Patinaje) por lo que está más cerca que nunca de poder defender su título de campeón continental. Uno de los puntos del día será la propuesta de la FEP (Federación Española de Patinaje), que como consecuencia de las elecciones a la presidencia, y como recogen los estatutos, propone la amnistía a todas las sanciones en vigor, aunque en realidad la única que existe es la del club coruñés. Todo apunta a que la votación será a favor de la amnistía ya que todas las partes implicadas, incluida el Liceo, llegaron a un acuerdo para resolver esta rocambolesca situación. Incluso Portugal, inicialmente la más reacia, votará que sí, a lo que se sumará también el apoyo del Comité Central de la CERS, que hará una recomendación de apoyo ante los miembros de la Asamblea.
Al contrario que lo que sucedió en diciembre, cuando el Liceo presentó un recurso ante el Comité Central de la CERS para anular la sanción formulada por el Comité Disciplinario del CERH (Comité Europeo de hockey sobre patines) y no fue admitido, ahora tiene razones para ser optimista por primera vez desde que el 31 de julio de 2011 comenzara esta odisea. «Sería un gran error que un club como el Liceo no participase en la competición europea», dice Carmelo Paniagua, presidente de la FEP. «Hemos hablado con varios países y todos nos apoyan, a lo que también ayuda que el Liceo, durante tantos años, se haya comportado siempre de una forma correcta y ejemplar», añade el máximo mandatario del patinaje español y candidato a presidir el CIRH (Comité Internacional de hockey sobre patines).
La anulación de la sanción supondría, por una parte, que Liceo podría empezar la competición, el próximo 11 de noviembre, en la Liga Europea de 2012, en la que defiende título y en la que en la fase de grupos quedó encuadrado en el D junto al Valdagno italiano, el Oliveirense portugués y el Geneve suizo; y por otra que, como campeón de Europa, luchará con el Bassano, ganador de la CERS, por la corona de la Supercopa continental, competición que todavía no tiene fecha ya que debía disputarse el pasado 13 de octubre, pero fue aplazada, con criterio, hasta después de la Asamblea. Lo que no está claro es qué pasara con la Supercopa del año pasado, la que enfrentaba a Liceo y Benfica y que ya está en las vitrinas lisboetas por la incomparecencia coruñesa. En su día, Eduardo Lamas reclamaba que se volviese a poner fecha al partido para que se pudiera disputar, pero pudo haber renunciado a ello.