Hace unos días asistí a la promulgación pública del fallo del ganador de la décimo novena edición del “Premio literario Fernando Arenas Quintela de Narrativa y Ensayo”, y a la entrega de este preciado galardón que recuerda a uno de los grandes libreros españoles del pasado siglo. Al acto, que se desarrolló en la Librería Arenas de La Coruña, y al que asistió numeroso público, fue introducido por Manuel Arenas, quien anunció la convocatoria de la vigésima edición de este Premio, que fue creado “Con el deseo de favorecer la creatividad de los jóvenes y de los autores, en lo que se refiere al ámbito literario, y como un medio de promover un mejor ambiente cultural”. Antes de que se diese a conocer el fallo, se proyectó un interesante reportaje fotográfico de los 60 años de existencia de la Librería Arenas, con especial presencia gráfica de su creador, Fernando Arenas Quintela, junto a personajes de la talla de Camilo José Cela, César Antonio Molina, la Condesa de Fenosa, Paco Vázquez, Manuel Fraga, Alfonso Abelenda, Núñez Feijóo, Carlos Negreira, Arturo Franco Taboada, etc. El jurado de este año estuvo compuesto por la escritora Elena Galván, el periodista Ezequiel Pérez Montes (Secretario del jurado), el escritor y cineasta Javier Ozores, el escritor y Catedrático de la Universidad de La Coruña Chema Paz Gago, el periodista y escritor Carlos Fernández Santander, y el ex Alcalde y ex juez José-Manuel Liaño Flores (Presidente del jurado), a quien vemos firmando el acta de concesión del galardón al escritor y periodista lucense José de Cora, autor de “Ilustres asesinos y distinguidos cadáveres», que fue la obra ganadora del XIX Premio Fernando Arenas. José-Manuel Liaño y la Viuda de Arenas fueron los encargados de entregar el Premio a José de Cora. ¡Enhorabuena, querido colega!. (Foto: Lajos Spiegel)
