De un tiempo a esta parte se han puesto de moda los programas televisivos y los documentales relacionados con el arte culinario. No hay cadena televisiva que se precie que no incluya en su programación alguna actividad relacionada con los fogones. La gente conoce cada vez más eso de las “estrellas Michelin”, los “soles Repsol” y otras distinciones otorgadas a los restaurantes, así como los premios y clasificaciones mundiales de los mejores chefs que pululan por el Planeta Tierra. Aunque, la verdad sea dicha, “no es oro todo lo que reluce”….Pero sí que es oro, del de verdad y no del “del moro”, el éxito logrado por la cinta “Cociñando na fin de mundo”, protagonizada por un grupo de cocineros del “Grupo Nove”, entre los que sobresale el pontevedrés Pepe Solla (de “Casa Solla”, en Poio-Pontecedra), con quien aparezco en la fotografía que ilustra esta información. El documental, dirigido por Alberto Baamonde, en el que participan también otros destacados protagonistas, fue presentado exitosamente en la 63 edición del famoso Festival Internacional de Cine de San Sebastián Esa inmejorable “carta de presentación” abrió al documental galaico las puertas del Festival de Cine de Málaga, y luego pegó un salto cualitativo y cuantitativo, ya que ha sido exhibida en diversas salas y festivales cinematográficos de Estados Unidos, Taiwán y Australia, e incluso fue galardonado con el acreditado premio gastronómico Álvaro Cunqueiro. Hace unos días se produjo la “vuelta a casa” de este documental, y fue mostrado al público en las sedes que Afundación tiene en La Coruña y en Vigo. Fue así como pudimos deleitarnos con el soberbio trabajo ofrecido por 24 cocineros del Grupo Nove, que reúnen entre sí nada menos que 8 estrellas Michelin y 18 soles Repsol, y con la valiosa labor de formadores e investigadores….¡Casi nada, vamos!. (Foto: Lajos Spiegel)
