La excesiva ambición de Clubes y dirigentes, han logrado convertir el fútbol español en un Circo. Es cierto que el fútbol es un gran negocio, y que los Clubes (SAD) son empresas. Pero no hay que olvidar que su razón de existir es un deporte: el balompié.
Ayer, en Rusia, comenzó un nuevo Campeonato del Mundo; y hoy, a las 20 horas, debutará España ante Portugal. Negros nubarrones se ciernen sobre un combinado español que estaba entre los favoritos al título, debido a contar con un improvisado Seleccionador Nacional: Fernando Hierro, de tan mal recuerdo para el R. C. Deportivo de La Coruña y los deportivistas. Y todo por la impresentable actuación del Real Madrid, de su presidente, y de Julen Lopetegui, que han “dinamitado” a la Selección Española a solo tres días del inicio del Mundial. Florentino Pérez se ha convertido en un auténtico indeseable, al anteponer sus intereses y ambiciones a la Selección Nacional fichando al seleccionador español, Lopetegui justo cuando iba a comenzar el Mundial. La portada de “Marca” del día 13 (no fue martes) era premonitoria. Pronosticó, sin pretenderlo, lo que sucedió: “El Seleccionador será entrenador del Real Madrid en cuanto vuelva de Rusia”…. y ya está en Madrid. Incluía una foto, a toda plana, de un Lopetegui muy sonriente. Pero la sonrisa se le quedó helada, cuando el Presidente de la Federación Española, Rubiales, le comunicó su cese fulminante por traicionar a esa entidad y a España. Por cierto, es ya la tercera vez que el escapista Lopetegui planta a la Federación Española para dirigir a un Club. Pero en esta oportunidad, es de “paredón” lo que ha hecho. Las redes sociales (de donde tomé la foto “Golpe de Estado”) llevan varios días “ardiendo” con este feo asunto. ¡País!.
