El Grupo Sial Pigmalión, que con tanto acierto como dedicación preside Basilio Rodríguez Cañada (con quien aparezco en la fotografía) creó en el año 1999 el Premio Internacional que lleva su nombre, para reconocer la obra de autores de todo el mundo que se hayan destacado como poetas. Un jurado internacional muy prestigioso propone cada año a autores sobresalientes en el género poético y otorga este galardón, convocado para celebrar la fundación de ese grupo editorial, que en esta ocasión cumple su vigésimo primer aniversario.
El “Premio Internacional Sial Pigmalión de Poesía” ha sido otorgado, entre otros, a los siguientes autores: Pedro M. Víllora, Rafael Pérez Castells, Ángel Petisme, Maurilio de Miguel, Aviva Dorón, Emilio Barrachina, Yolanda Sáenz de Tejada, Alejandro Guillermo Roemmers, Inma Jiménez Jorquera, Javier Lorenzo Candel, José María Triper… Y este año, un jurado internacional, presidido por Carlos Orlando Pardo (Colombia) y formado por: Andrés Aberasturi, Manuel Juliá, Miguel Losada, Basilio Rodríguez Cañada, M.ª Antonia Sanabria Hernández, José María Triper, Carlos Vásquez-Zawadzki (Colombia) y Octavio Uña, decidió, por unanimidad, conceder este galardón a Marín Aranda, seudónimo del poeta José-Luis López Jiménez, por su poemario “Aromas de otoño” y el conjunto de su obra. El libro premiado será presentado en las próximas Feria del Libro de Bogotá y de Madrid. Admirador de la poesía clásica española, sus versos le hablan a la mujer, al amor y a la naturaleza, en un mensaje que el poeta comunica con palabras sencillas y llenas de profunda sensibilidad.
Se define como un gran soñador. Su lenguaje es directo y claro, prefiriendo la racionalidad y la expresión rítmica y musical de sus versos ante hipótesis que hay que descifrar, con un lenguaje cercano y amigable. (Foto: Lajos Spiegel)