El ejemplar Club de Regatas Salgado-Perillo, que el año próximo celebrará sus “Bodas de Oro” existenciales y del que tengo a gala ser Vicepresidente fundador, Socio de Honor e Insignia de Oro, es sin duda alguna una de las mejores entidades deportivas del Ayuntamiento de Oleiros (La Coruña). Tiene en su haber numerosos Campeonatos de España, de Galicia, Banderas, Medallas de Oro, Plata y Bronce, así como grandes triunfos en competiciones nacionales e internacionales. El remo es el objetivo prioritario del Club, aunque en sus amplias y acogedoras instalaciones de la coruñesa Playa de Santa Cristina siempre hubo y hay lugar para actividades tan diferentes como la música, teatro, yoga, pintura, ajedrez, tenis de mesa, billar, futbolín, dardos, etc. Desde hace un par de años incorporaron exitosamente el remo femenino, que ha logrado una gran acogida entre las socias e hijas de los socios. Fruto de ello, y del interés con que lo han tomado, es la notable progresión que experimentaron estas dos últimas temporadas, a pesar de que la trainera que utilizaron es una “vieja gloria” que ya no está para muchos trotes y que condiciona notoriamente los resultados de las remeras perillanas. La Junta Directiva es consciente de tan perjudicial circunstancia, que lastra los logros y esfuerzos de sus deportistas femeninas, motivo por el cual decidieron adquirir una embarcación más adecuada que la actual. Pero como los recursos económicos del Club son bastante limitados, han decidido realizar una campaña pública de captación de fondos (lo que popularmente se denomina “crowdfunding”) entre los socios, familiares, amigos y aficionados, iniciativa a la me uno y deseo los mayores éxitos, ya que esas jóvenes deportistas lo merecen. Y con el fin de presentar esa iniciativa, organizaron un encuentro en la sede del Club, que registró gran asistencia. El acto fue presentado, con sumo acierto y simpatía, por Iris Simón, y contó con la extraordinaria colaboración de la ex remera del Club Mónica Castelo, actualmente en las filas del CRAT de La Coruña e integrante de la Selección Española de Rugby. Un “vino gallego” puso adecuado y animado remate a tan grato encuentro. ¡Chapó!. (Foto: Lajos Spiegel)