El lunes comenzó la pretemporada del HC Borbolla femenino de cara a su debut en la OK Liga femenina. El equipo entrenado por Carlos Parga trabaja estos días en la Playa de Bastiagueiro (como podemos ver en las fotos) con el objetivo de ir cogiendo la forma y poner las bases para una temporada que será muy dura y exigente. Ramón Maañón es el preparador físico del equipo y nos cuenta como es esta primera fase de la pretemporada.
“El objetivo principal de la pretemporada para nuestro equipo, es conseguir una rápida adaptación física lo más cerca posible del ritmo de juego al que nos vamos a enfrentar. El estímulo que tratamos de aplicar es muy elevado para que su huella permanezca el mayor tiempo posible, sin necesidad de tener que tocar mucho este apartado y así poder meter mayor volumen de trabajo a otros aspectos más relevantes para afrontar la temporada. La propia competición hará que las jugadoras mantengan un nivel condicional elevado, con lo que la preocupación que tenemos es que se fatiguen por exceso de carga durante la competición, además de las lesiones propias del deporte. Disponemos de seis semanas para trabajar antes del primer partido, de las cuales, las cuatro primeras tendrán mucha carga física y en las dos últimas este aspecto tendrá menor presencia en los entrenamientos, las jugadoras ya traen trabajo adelantado pues tenían un programa de adaptación al entrenamiento de veinte días previo a la pretemporada”.
Ramón Maañón nos comenta que “La primera semana es la más estresante para las jugadoras, puesto que se hace sin patines, se trabaja durante casi dos horas sin prácticamente descanso en cuestas o en arena blanda para que los desplazamientos sean difíciles e incómodos, mucho trabajo general en el que implican toda la musculatura y en ejercicios a los que no están acostumbradas, con el fin de provocar un incremento del rendimiento rápido. En las tres semanas siguientes el trabajo físico se hará en pista sobre patines, también de carácter general, que nos permita generar las bases para un posterior trabajo más específico y espaciado en el tiempo”.
Por último, Ramón añade que “En resumen lo que buscamos es que todo el trabajo de la pretemporada sea con mucha fatiga, mucho stress, y mucha toma de decisiones bajo circunstancias que a las jugadoras les resulta incómodo pues es lo que nos vamos a encontrar a lo largo de esta temporada”.
