Mis aficiones al arte pictórico y gastronómico me permitieron comprobar recientemente que buenos amigos desean el ascenso blanquiazul a la máxima categoría. Estas muestras de apoyo me conmueven y me refuerzan enteramente mi convicción en las posibilidades del Real Club Deportivo de La Coruña de cara a cumplir con el objetivo marcado.
Uno de los que me mostró este deseo fue mi amigo el pintor vigués Xavier Magalhaes, el artista hijo de lisboeta y pontevedrés es un discípulo aventajado del maestro Laxeiro con el cual aprendió a dibujar y pintar.
Los temas de disertación con el gallegoportugués fueron el arte pictórico, donde el artista dejo constancia de su experiencia y conocimientos. Otra cuestión comentada fue la buena marcha del Depor en la segunda división de la liga española de fútbol, donde no pudimos obviar que el equipo coruñes es el líder, y Xavier nos dejo sentir la huella y la sensibilidad que tiene por Galicia. En fin, un placer y un lujo que este vigués y celtista desee el ascenso del Depor en su condición de buen gallego. Una vez deseado su incondicional apoyo al ascenso deportivista me espeto que el Celta no pensaba distanciarse en más de tres puntos hasta el próximo derbi gallego, momento en que sumarian los tres puntos y nos acompañarían hasta final de temporada en puestos de ascenso directo. También sacó en conclusión que gracias al Depor ellos estarían la próxima campaña en primera división, que habíamos descendido para motivarlos y rescatarlos del infierno gracias a la extramotivación. Todo esto lo dijo sin despeinarse, cosa difícil, pues parece el fantasma barbudo,
Otro amigo que me traslado días pasados durante una cena -xuntanza de los amigos de la buena mesa- en el Pazo de Vilaboa su deseo de volver a ver al Depor en la máxima categoría, fue el conocido crítico gastronómico Andrés Sánchez Magro “el gato gourmet”. Este magistrado toledano es también crítico literario y taurino en medios de comunicación como la revista Época, La Razón, Intereconomía y La Gaceta. Pero si queremos destacar algo de Andrés, me decantaría por decir que lleva en sus venas sangre rojiblanca, desde niño ha seguido al Atlético de Madrid, club de sus amores, por media España. Todo un honor que un pura sangre de la más pura vera del río Manzanares apoye el ascenso del Depor. En la misma medida que es un incondicional defensor del equipo del estadio Vicente Calderón, no duda en promocionar mediante sus colaboraciones en diferentes medios el amor a sus grandes pasiones como la literatura, arte y gastronomía.
Pronto celebraré con estos dos amigos el ascenso deportivista, con Xavier Magalhaes degustaré unas ricas ostras en Arcade y con Andrés “el gato gourmet”.cenando la buena cocina de la Taberna del Lío en Madrid.
Fuerza depor.
