El principal objetivo del Deportivo para esta temporada ya esta cumplido, y por cierto, a raja tabla. Nuestro querido Deportivo está en zona cómoda de la tabla y ya tiene los famosos 42 puntos que aseguran, salvo catástrofe, la permanencia en la máxima categoría.
Una vez asegurado (con dos botellas de buen vino por el medio) uno de los mayores objetivos del consejo de administración como era la renovación de Miguel Ángel Lotina, el presidente Augusto César Lendoiro ya tiene bastante adelantadas las próximas renovaciones de Aranzubía, Lopo, Sergio, Valerón y Juan Rodríguez. Esperemos que todo ello llegue a buen fin. Desde estas líneas también le recomendaría al máximo mandatario blanquiazul un contrato de futuro para Juan Domínguez, una auténtica perla que puede dar muchas alegrías no sólo a la parroquia blanquiazul sino al fútbol español. Ojo a este chico que sólo tiene 20 años. No se nos puede escapar bajo ningún concepto.
A buen seguro que estas renovaciones serán mucho más fáciles de conseguir que las frustradas de Verdú y Lafita. ¿El motivo? Muy simple: el Dépor con casi total seguridad disputará competiciones europeas la próxima temporada y los buenos jugadores quieren jugar en Europa.
Otro desahogo para el club a la hora de realizar las renovaciones será la finalización de los pagos realizados a los exdeportivistas Scaloni y Diego Tristán. Flaco favor nos hizo Caparrós largándolos a la calle cuando aun tenían contrato en vigor.
Cambiando de tercio, aunque hoy en día suene mal, a lo largo de esta liga hemos pasado por varios estados de ánimo, sorpresa, tristeza, desanimo y finalmente alegría, pasión y confianza. Esa confianza en la plantilla del Dépor, es la que nos alimenta la ilusión para conseguir que el próximo sábado ganemos al Valladolid. El de Pucela es un equipo muy pitado en Riazor desde aquella semifinal de Copa y desde que el coruñés Luis Suárez, meses después, no se le ocurriera otra cosa que hacer debutar con la selección nacional a Fernando Hierro y Minguela en un partido ante Polonia en Riazor. No encontró otro sitio mejor. Aquel día de 1989, formaban parte del combinado español Martín Vázquez, Villarroya (que también debutaba) y Julio Salinas. Quién iba a pensar, con el equipo en segunda, que años más tarde serían deportivistas. ¡Cuántas cosas han pasado desde entonces!
Artículo publicado en el diario gallego DXT Campeón.