Aún no tengo en mi poder los datos de agosto, pero a juzgar por la evolución habida hasta el mes de julio, la Torre de Hércules, en La Coruña, marcará este año un nuevo record de visitantes, pese a que descendió el número de extranjeros que se acercan hasta el único faro romano en funcionamiento que hay en todo el mundo.
Los visitantes de la Torre de Hércules, símbolo de la ciudad de La Coruña y de la Diputación Provincial de La Coruña, aumentaron de forma exponencial desde que fue declarada Patrimonio de la Humanidad. Tan importante reconocimiento mundial fue posible merced al decisivo apoyo que nos prestó el destacado socialista coruñés César Antonio Molina, Ministro de Cultura por aquellas calendas, a los que integramos el Instituto Torre de Hércules, entidad civil y sin ánimo de lucro cuyos componentes luchamos duramente y sin desmayo hasta ver alcanzados nuestros objetivos. Por cierto, en agosto pasado el mencionado Instituto Torre de Hércules perdió a uno de sus más destacados integrantes. Me refiero a mi buen amigo y ex concejal coruñés Segundo Pardo-Ciórraga Santos, lamentable pérdida a sumar a las de otros dos de los fundadores del ente herculino: el doctor José-Luis Iglesias (Manito) y Quico Mitchell, ingeniero del Ayuntamiento de La Coruña…. Según los datos aportados por Ana Santorum, directora de la Torre, durante el año 2017 visitaron el faro romano 132.100 turistas, marcando un nuevo record. Por la evolución habida hasta ahora todo apunta a que este año se batirá esa marca, ya que mes tras mes se obtienen mejores cifras que en el año precedente.
Un dato: durante el mencionado mes de julio las visitas se incrementaron nada menos que un 52 por ciento, hasta alcanzar las 18.605 personas. Y otro dato muy importante: a todos les gusta la Torre de Hércules. Lo celebro. (Foto. Lajos Spiegel)
