Salvemos al Dépor

Salvemos al Dépor, por Santiago Togores

Entiendo que, como todas las empresas y ciudadanos de este país, el Deportivo tiene que cumplir con sus obligaciones tributarias y hacer frente a las deudas contraídas con las entidades financieras, proveedores, futbolistas y personal de la entidad.

Soy consciente de que el Deportivo, como muchas empresas y ciudadanos de este país y, por supuesto, la mayoría de los clubes de primera y segunda división,  ha vivido en los últimos 20 años por encima de sus posibilidades, generando una enorme deuda imposible de hacerle frente sin que se negocien con los acreedores un plan de pagos que haga viable la reducción de la misma y por tanto la viabilidad del club.

No quiero entrar a valorar quienes son los responsables de haber llegado a esta situación, porque en este tema todos tendremos una opinión distinta y creo, que ese es otro debate y, en su momento, habrá que depurar responsabilidades de unos y otros en la gestión realizada durante estos años.

Lo que me preocupa, y creo que es un sentir general, es el presente y futuro de esta entidad que, aunque no me gusta mucho la frase, es “algo más que un club”, es un sentimiento y una bandera bajo la cual se aglutinan cientos de miles de seguidores en todo el mundo, un escaparate para nuestra ciudad y una fuente de ingresos para muchos comerciantes y hosteleros coruñeses que verían sus negocios en serio peligro de desaparición, sin esa afluencia de aficionados que, cada quince días, se dan cita en nuestra ciudad para asistir a los encuentros de fútbol en Riazor. Me preocupa la desaparición de ese símbolo del coruñesismo que reúne a todos por igual, independientemente de su ideología política, de su estatus económico y social, a niños y mayores, a hombres y mujeres e incluso a los que no les gusta el fútbol. Eso me preocupa, la desaparición de un símbolo que nos une a todos, con el compartimos alegrías y tristezas, momentos maravillosos y decepciones muy grandes, pero todos juntos, como una gran familia, como una ciudad unida. Esa perdida seria irreparable.

Desde aquí hago un llamamiento a todas las instituciones, a la administración, empezando por el ayuntamiento coruñés, a todos los socios, a los ciudadanos y en general a todos los deportivistas para que, apoyemos más que nunca a  nuestro DEPORTIVO, con el objetivo de que se puedan conseguir acuerdos y poder solventar esa deuda de una manera racional que no comprometa la supervivencia del club.

Entre todos SALVEMOS AL DÉPOR.

FORZA DEPOR.