En este bisiesto y muy complicado 2020 se cumple el 40 Aniversario de la inauguración de la excelente pizzería “Piccolo Mondo”, sita en la coruñesa y turística Playa de Santa Cristina. En el año 1980, la pusieron en marcha Antonio Castro y Jesús Souto (prematuramente fallecido), quienes ampliaron el pequeño local inicial hasta convertirlo en el amplio espacio actual, que cuenta, además, con una pequeña terraza delante de la fachada que da a la calle Humboldt.
Hace unos cuatro años se hicieron cargo de esta señera pizzería Javier Gómez Sánchez (en la primera fotografía) y su esposa, María-Ana Campo Piñeiro, que están al frente del negocio: Ana en la cocina, y Javier en la barra y en servicio al públicol, ayudado por un camarero. Mercede a su esfuerzo y dedicación lograron mantener, e incluso incrementar, el bien ganado prestigio de “Piccolo Mondo”, trabajando muy fuerte incluso durante la cuarentena (Estado de Alarma) del maldito Coronavirus, ya que uno de sus más firmes pilares es la venta para llevar para casa.
En “Piccolo Mondo”, establecimiento que goza de la máxima calificación en las redes sociales (están en “Facebook” y en “Twitter”), podemos degustar hasta 25 pizzas diferentes, con precios entre 7 y 11 euros: Margarita, Chorizo, Tropical, Roquefort, Cuatro Estaciones, Jamón, Champiñón, La Reina, Caprichosa, Anchoas, Bonito, de la Casa, Serrana, Napolitana, Marinera, Marinera Especial, Sardinera, Pepperoni, Carbonara, Vegetal, Primavera, Cabrales, 4 quesos, Lacón, y Cecina.
Las pizzas se pueden acompañar con varios extras, que van desde los 0,50 euros que cuesta el tomate laminado, aceitunas, salsa de tomate, o pimientos de piquillo; a jamón, champiñón, chorizo, bonito, bacon, mozzarella, cabrales, pepperoni, roquefort, o aceitunas rellenas de anchoas, por 1 euro; anchoas: 1,50 euros; o elegir: gambas, jamón serrano o cecina, por 2 euros.
También tienen hamburguesas, sándwiches, pepitos, y bocadillos de panceta, o de jamón york y queso, cuyos precios oscilan entre los 3 y los 5.50 euros. Tal cual, se lo cuento a mis queridos lectores (h-m).
Cambio de tema. Días atrás deseé los mayores éxitos, en el reciente Festival de Cine de Ourense, al destacado cineasta coruñés Ignacio Benedeti, quien me respondió lo siguiente: “Se agradece, Roberto. Buenos deseos como lo tuyos son importantes pues los pensamientos positivos se transmiten”.
Sobre el político socialista Julián Besteiro, nueva aportación del orensano Amador Rego: “Julián Besteiro Fernández, fue el político más culto y honrado de la República. Encima es gallego, y muchos lo desconocen. Yo había oído hablar de él, cuando era pequeño, pero resulta que el sábado 7 de agosto de 1997, por Televisión Española, en la primera cadena y a las once de la mañana, vi un documental sobre este hombre, que me emocionó y me impresionó. Es un gran desconocido. La única persona que en Orense ha hablado de él soy yo, en esa revista y en La Región. Hablo de ese socialista desde mi afiliación a VOX. La izquierda no lo nombra. Asistió a la proclamación de la Republica desde la puerta del Sol, lo lleva allí, desde la Casa del Pueblo, Santiago Carrillo, Tenía 16 años, y el precoz niño ya conducía. Un abrazo”.
Días atrás se produjo el fallecimiento de un viejo amigo legionario: José-Luis Cazón Loureda (primero a la izquierda, en la primera fila de la segunda fotografía), a quien tuve el honor de tratar en mi condición de Vicepresidente de Veteranos de La Legión 20 de Septiembre, de La Coruña, un hecho que tuvo gran repercusión en las redes sociales, sobre todo entre los veteranos legionarios.
El Coronel de La Legión Ramón Vidal me hizo seguir este mensaje de la viuda: “Buenos días, soy la mujer de José Luís Cazón Loureda. Me tomé la confianza de buscar en su teléfono algún número relacionado con sus amistades de la Legión, para comunicaros qué, después de una enfermedad de varios meses, ha fallecido ayer. Me consuela saber qué murió en paz con los suyos, pero vosotros erais también parte de él y le gustaría qué lo supierais. Tenerlo en vuestras oraciones. Un saludo”.
El artillero Carlos Brea (El Bigotes), publicó lo siguiente: “Ha muerto nuestro Cabo de Artillería y Caballero Legionario José Antonio Cazón, cáncer de pulmón, a los 66 años. Deja viuda sin hijos. D. E. P. Tengo parentesco con él. Tenemos un tío en común, Cazón y yo. Se trata del capitán de Ingenieros Cazón, que murió en combate, en el frente en 1936 caído por la Patria yendo con Yagüe, estaba destinado en Melilla. Está enterrado con otros caídos por la Victoria en el Valle de los Caídos. La muerte no es el final, Cazón. DEP”.
Por su parte, el Cabo de Artillería Ramón Mella, escribió: “Ya me acuerdo de Cazón. Venía a las comidas que se hacían en Honor de La Legión, en la Cocina Económica. Grave error el pasarlas a un restaurante con ánimo de negocio, y dejar la Cocina Económica, un lugar emblemático de La Coruña, y ayudar a la gente necesitada. Yo, desde que lo cambiaron al Casino, no he vuelto más. Un desastre. Un abrazo. DEP”.
Y otra nota necrológica, aunque desde el otro lado del Océano Atlántico, concretamente desde su natal y querido Buenos Aires. Mi excelente amiga y gran cantante, Stella Díaz (Estrella Galicia), publicó lo siguiente: “Se fue un amigazo… mi querido, tierno, niño, de barrio, Jorge Oteiza. Tremenda tu partida. Que en paz descanses, Jorge!!! ?Hasta siempre querido compañero!! ?????????”.
Finalizo por hoy. Prometo seguir publicando más crónicas de esta “Nueva Normalidad”. ¡¡¡Mientras el cuerpo aguante!!!. (Fotos: Lajos Spiegel)