Se me hace cuesta arriba comenzar la columna de hoy, pues hace poco menos de hora que salí del estadio de Riazor de presenciar el partido entre el Deportivo y el Gimnástic de Tarragona. El encuentro no lo perdimos auque estuvimos a punto pero tampoco lo ganamos. El equipo catalán llegaba como penúltimo en la tabla y los deportivistas que asistimos al estadio aunque sabemos que nadie regala nada teníamos fe en ganar y sumar tres puntos ante un rival flojo, por no decir muy flojo.
El Nastic que no ha conseguido ninguna victoria en la liga 2011-2012 y al que el Valladolid, Las Palmas, Huesca y Villareal le habían marcado en las últimas semanas una media de tres goles por partido parecía un buen rival para hacer olvidar a la parroquia blanquiazul el vergonzoso partido jugado por los blanquiazules en Alcoy hace una semana.
Hasta el momento y pese a no estar realizando una buena temporada, de ocho partidos ganamos cuatro, perdimos tres y empatamos uno, el mister valenciano sigue gozando del crédito y confianza que le otorga la afición coruñesa. La afición no es tonta y por eso le dará a Oltra un margen de confianza pues considera que las múltiples lesiones, el tiempo de adaptación y el no poderse sentar en el banquillo influyen de alguna forma en su trabajo. De todos modos y como bien sabemos “el amor con amor se paga si no queremos que se acabe”. Por lo cual aprovecho la ocasión para rogar a José Luís Oltra que no insita en invitar a los que no quieren sufrir en Riazor a que vayan al cine. Debe entender que mucha gente luchamos desde hace décadas para llenar las gradas de Riazor. Y a modo de apunte añadir que los coruñeses y deportivistas sabemos sufrir, apoyar y animar por eso estuvimos donde estuvimos y conseguimos lo que conseguimos.
Con los jugadores pese a recibir una pequeña y pitada en la tarde de ayer, pasa ídem de lienzo, unos salen de lesiones, otros suben del filial y los mas gozan del cariños de la grada por lo cuál es previsible que sigan contando con el apoyo de una de las mejores aficiones de España.
Ahora más que nunca Forza Dépor y Viva La Coruña.