En un “Parte de Guerra” publicado días atrás me referí, en particular, a la reanudación de las actividades del Sporting Club Casino de La Coruña, y a su activo Presidente Juan José Medín Guyatt, dentro de las limitaciones impuestas por el vigente “Estado de Alarma”, y respetando estrictamente las normas dictadas por el Gobierno y las Autoridades Sanitarias.
Y hoy quiero referirme a las entidades de carácter cultural y artístico que, poco a poco, van restableciendo y organizando sus respectivas programaciones. Ta es el caso de la Asociación de Artistas Plásticos Gallegos (ARGA), que comunicó a sus socios y público en general que reabrió su local, con esta breve nota adicional: “ Os dejamos el artículo que en su día nos dedicó el amigo incondicional Roberto L. Moskowich-Spiegel Pan de esta magnífica muestra que hoy se vuelve a abrir después del confinamiento”. Se refiere a la soberbia exposición “Acuarelistas de As Xubias”.
También el Museo de Bellas Artes de La Coruña ha reiniciado su actividad expositiva, prorrogando la exposición temporal “Luis Seoane, o legado de Maruxa Seoane” (primera fotografía), que permanecerá en sus instalaciones hasta el 20 de septiembre de este año, y que se podrá seguir a través de las redes sociales de Facebook, Twiter e Instagram, así como en su página web y en “Museo na casa”.
Y dentro de esa misma línea de retomar sus funciones habituales, esta mañana, a las 12, en la sala de exposiciones del Palacio Municipal de La Coruña, se inaugurará la muestra titulada “Enrique Lista. Mirador Aves”. Tal cual, se lo cuento.
La pintora y escritora venezolana Ana-Isabel Leonett Canales, me remitió este guasapo: “He leído con atención tus partes de guerra, y si me permites quiero hacerte una pequeña sugerencia y es que repites mucho en todos los partes, que no tiene perros ni gatos, creo que si lo mencionas en uno de ellos basta”. Y esta ha sido mi respuesta: “No estoy de acuerdo. Es para remarcar la soledad o el encierro sin un animal de compañía. Además, cada vida, y sus circunstancias, son diferentes. Besos”. Tal cual.
En relación con mi artículo del pasado lunes, sobre el gran negocio del fútbol y mis deseos de permanencia en sus actuales categorías tanto para el Real Club Deportivo de La Coruña como para el Celta de Vigo, mi buen amigo y futbolero Ramón Mella, me escribió: “Te olvidaste del LUGO, igual que el Deportivo en 2ª A”. En efecto, así ha sido. Muchas gracias, y corregido queda.
Y con respecto al “Parte de Guerra” en el que mencionaba un aniversario de la creación del Judo Club Coruña, José-Antonio Borrallo, pintor y escritor, me remitió estos correos: “Buenas tardes, amigo Roberto. Esta foto no la tienes, ¿recuerdas el lugar y el evento?. Te conocí aquella noche, entonces practicaba yo artes marciales. Luego fuiste mi presidente en «El Eco”. Espero que hayas dormido la siesta y estés relajado en un día tan especial. Feliz día de tu Santo y no trabajes tanto. Aprovecha la tarde de playa. Un abrazo. Borrallo”. Muchas gracias, querido amigo.
Arturo López Petinal (en la segunda fotografía, en un Palco VIP del Estadio de Riazor, con Augusto Pérez Cepeda, Avelino Pérez, Fernando Blanco, Fede García Poncet, Cheché Losada y José-Antonio García Artus), me remitió el siguiente mensaje: “No hay día que no lea tus Partes de Guerra, Roberto. Ya tienes para otro libro con todos los que llevas escritos!. Un abrazo muy fuerte. Será un gran libro, sin duda. Crónica de una pandemia jamás imaginada. Un abrazo muy fuerte”. Espero que así sea, mi querido amigo.
La magnífica pintora Rosa Guisán, me remitió estos mensajes: “La emoción tiene prioridad sobre todo lo demás, Virginia Woolf. Que bien, pero nunca cocinas?. Seguro que lo harías bien. Porque se nota que te gusta la buena cocina. Creo que esa es la mejor condición para andar entre fogones”. Pues reconozco, humildemente, que no sé hacer ni un huevo frito, pese a haber sido integrante durante años de la popular “Peña del Huevo Frito”, de la señorial ciudad de Betanzos (La Coruña).
En relación con mi “Parte de Guerra” sobre el “Banco de Alimentos”, el ourensano Amador Rego me ha remitido este correo electrónico: “Curiosidades. Interesante lo que citas de esas frases, su historia y motivo, muchas gracias. He trabajado en el Banco de Alimentos, 20 días y 60 horas. Diez días el pasado año, y diez días este año. Es un trabajo bonito y te engancha. Éramos solo 12, teníamos que ser más…. un abrazo. Amador”. Magnífica labor, te felicito.
Y también en torno al mencionado “Parte de Guerra”, he recibido este mensaje de la excelente pintora Marta Pardo de Vera: “Me ha gustado lo que has escrito y coincidir con mi buen amigo Felipe que siempre me apoyó en mi trabajo. Lo quiero mucho. Estas personas que, sin cacareos, ayudan a la cultura. Como creo haces tú. Muchas gracias”. Es un placer hacerlo, querida Marta.
Tiempo ahora para personas del “Grupo de Riesgo” del Coronavirus. Y hoy se asoma a esta ventana informativa Carmen López Olmedo, mi querida ahijada en el Club de Leones La Coruña-Marineda, con quien aparezco en la tercera fotografía imponiéndole la insignia el día de su entrada en esta ONG de dimensión mundial.
Carmen nació el 10 de febrero del año 1951, es abogada, y presta sus servicios en la Xunta de Galicia, en la ciudad de La Coruña. También fuimos compañeros en la Real Orden de Caballeros de María Pita, asociación de la que se fue decepcionada porque, a su juicio, no cumplía los objetivos que debía acometer.
Hacía más de un año que no tenía el placer de hablar con Carmen, ya que la última vez que nos vimos fue en el mes de mayo del pasado año, en la popular vinoteca coruñesa “O Secreto”, y la encontré muy animada a pesar de las actuales circunstancias.
Carmen estaba casada con Ángel Fenor de la Maza y Cornide Quiroga, Abogado del Estado y Director General de la Xunta de Galicia durante el mandato de Gerardo Fernández Albor, también ahijado mío en el Club de Leones, fallecido hace unos cinco años. Desde entonces, vive sola, en San Pedro de Nos-Oleiros (La Coruña).
Me dijo que cumplió a rajatabla las instrucciones del Gobierno, y que llevó bien el confinamiento, merced al buen entendimiento con sus vecinos, que le ayudaron mucho. Vive en un edificio de cuatro plantas, con dos viviendas en cada una, y solo salía a la calle lo imprescindible, ya que normalmente un vecino compraba para todos.
Mujer que precisa tener la cabeza ocupada, y que pertenece al Club de Roma y a la Fundación Independiente, pasó la mayor parte del encierro leyendo mucho, escribiendo y viendo algo la televisión. También hablaba por teléfono con sus amigos y, sobre todo, con sus tres hijos: un varón y dos mujeres.
Carmen está deseando reincorporarse físicamente a su despacho de la coruñesa Plaza de Pontevedra, donde seguirá trabajando hasta que se jubile en febrero del próximo año. ¡Que así sea, mi querida amiga!.
Y finalizo por hoy. Prometo seguir dándoles más “Partes de Guerra”. Mientras el cuerpo aguante…. ¡¡¡Saludos y salud!!!. (Fotos: Lajos Spiegel)
