Siempre digo que la ciudad de La Coruña es todo un ejemplo, incluso a nivel nacional, en lo que a solidaridad se refiere. Por suerte para las personas y colectivos más necesitados de nuestra urbe y su amplia comarca (no debemos caer en el fariseísmo de algunas formaciones políticas que parecen empecinadas en negar absurdamente la existencia de esas bolsas de pobreza) hay mucha gente dispuesta a ayudarles, bien a título personal o a través de diferentes entidades.
Y entre estas últimas es de justicia mencionar al Club de Leones La Coruña-Marineda, actualmente presidido por José-Luis Ramallo Varela, que el año próximo cumplirá 25 años ininterrumpidos ayudando a paliar las carencias de los menos favorecidos por la fortuna. A tal fin, a lo largo de todo el año, organizan una serie de actividades de tipo recaudatorio (venta de Lotería de Navidad, Cena-tómbola de Aniversario, Trofeo Benéfico de Golf, Gran Laconada Familiar, Comida en la Cocina Económica, etc.), cuyos ingresos destinan íntegramente a fines benéficos, ya que todos los gastos que origina el funcionamiento de los Clubes de Leones son sufragados por los propios socios con sus cuotas mensuales.
Entre los colectivos a los que destinan tales ayudas se encuentran la Cocina Económica, el Hogar de Sor Eusebia, el Comité Anti Sida de La Coruña (CASCO), Agarimo, las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, el Hogar Santa Lucia (Mujeres sin techo), la Fundación Raiola, Faro de Monte Alto, la Fundación Padre Rubinos, la Asociación Antidroga Antonio Noche y diferentes Parroquias de la ciudad.
Una de sus actividades de mayor éxito y alcance social es la recogida de alimentos (sobre todo su famosa “Operación Kilo-Litro) y las consiguientes entregas a diversos colectivos y personas particulares. Precisamente en la fotografía que ilustra esta información se recoge la entrega realizada recientemente a la Asociación Antidroga Antonio Noche, acto al que concurrieron el mencionado José-Luis Ramallo y la presidenta de Antonio Noche, Celia-Rosa Otero Raña, quienes estuvieron acompañados por varios integrantes de ambas entidades benéfico-sociales. Todo un magnífico ejemplo, sí señor. (Foto: Lajos Spiegel)