El magnífico artista orensano Ramón Conde es, sin ningún género de dudas, uno de los mejores escultores que ha dado Galicia a lo largo y ancho de su rica y secular historia. Recuerdo que una de las primeras creaciones suyas que más me impactaron fue la que expuso en el centro Comercial Cuatro Caminos durante la inauguración de este popular recinto, acontecimiento que tuvo lugar el 3 de septiembre del año 1987. Pues bien, desde ayer, Ramón Conde está participando en la prestigiosa “Figuration Critique de Paris”, sensacional muestra artística que se ubica en el “Bastille Design Center”, a la que solamente se concurre mediante invitación expresa y en la que únicamente participan artistas de auténtico calado internacional. Es de resaltar, además, que es el segundo año consecutivo en que Ramón Conde luce su obra al abrigo de la Torre Eiffel, aunque en este caso lo haga con creaciones de pequeño formato pero de gran calidad y belleza. A Ramón Conde se le conoce mundialmente por sus enormes piezas escultóricas, que adornan muchos lugares públicos, sobre todo en importantes enclaves de Galicia, como es el caso de “El guardián” (en la fotografía) una gran escultura situada al pie de la milenaria Torre de Hércules, Patrimonio de la Humanidad, en la ciudad de La Coruña, urbe en la que también se encuentra “La Paternidad”, que está ubicada en el Rectorado de la Universidad de La Coruña. Y, a bote pronto, también recuerdo entre sus grandes obras la estatua a Alonso III de Fonseca, en el compostelano Pazo de Fonseca, y “Los rederos·”, en la gran Vía de Vigo. ¡Enhorabuena, y que sigan los éxitos, querido y admirado Ramón!.
(Foto: Lajos Spiegel)
