Exitosa presentación-degustación de los vinos de Sada, de la Quinta val de Sonheiro Rías Medias

“Farruco” (con quien aparezco en la fotografía) es, sin ningún género de dudas, un personaje singular y con grandes iniciativas empresariales. Fino y elegante jugador de fútbol, que jugó en el Sporting Sada y desechó fichar por el RCD Español de Barcelona, a él le corresponde el mérito de que los vinos de Sada (La Coruña) figuren en el mundo mundial. Su profundo galleguismo queda patente en los muros de su finca y en el cariño ancestral que demuestra por nuestra tierra y sus productos, en este caso por las vides de las que extrae unos caldos blancos y tintos magníficos. A través de su hermano Eduardo, gran amigo y excelente pintor y escritor, recibí una invitación para asistir a la presentación-degustación de los vinos “Quinta val de Sonheiro Rías Medias”, en la que fue la exitosa tercera cata de esos vinos desde su irrupción en el mercado. Fue una gran fiesta, con música gallega en vivo y unas buenas viandas, generosamente regadas con los caldos que se presentaban. Según nos explicó el propio Farruco, con quien aparezco en la fotografía, se trata de vinos “enxebres” y artesanos, con una tradición de más de 3.000 años, cosechados y no fabricados, Son vinos sin efectos secundarios, obtenidos en la bodega más pequeña de Galicia, y en unas plantaciones propias que son las que se encuentran más al Norte de la Península Ibérica. La producción de este año se limita a 3.000 botellas, numeradas, con un vino que busca mantener las mejores características naturales, sin “caricaturas esnobistas”. Y, además, con una presentación muy lograda tanto de las botellas como de los estuches de 1, 2 y 6 botellas. Una auténtica delicia, se lo aseguro. ¡Compruébenlo, please!. (Foto: Lajos Spiegel)