Del Área de Myvtan a la de Akureyri, con visitas a los Castillos Negros y a la Cascada de Godafoss

01-Entrada-y-salida-de-la-Iglesia-Gótica

El miércoles 28 amaneció con buen tiempo.Madrugué, pues la jornada era bastante completa y complicada, con largos desplazamientos y buenas caminatas. Al terminar el desayuno cambié impresiones con mi excelente guía, Örn, que por cierto hablaba un español bastante bueno. Únicamente tenía algunos problemas de comprensión si yo utilizaba términos poco frecuentes en el lenguaje más común.

 

El precioso entorno del LagoMývatn

 Tras ese pequeño paréntesis, salimos caminando hacia el Lago Mýtvan, ya que el Hotel Gigur se encontraba al borde del mismo. El lago está totalmente rodeado de volcanes, cráteres y campos de lava,situados al Este,y constituye en su conjunto una maravillosa reserva natural. La visita escómoda ya que han construido unos amplios y bien cuidados senderos, con el suelo en gran parte cubierto de madera.

Los cráteres son “de explosión”, pueshan sido formados por grandes masas de lavaque al impactar contra el suelo originaron esos grandes huecos. Esagradable y fácilsubir y bajar al interior de esas curiosas y casi perfectas formaciones circulares. Y en el Este del lagoemergen unas llamativas formas rocosas (parecidas a los “roques” canarios),cuyas fotos había visto ya en los folletos promocionales de esa zona.

 

Los “Castillos negros” de Dimmuborgir 

Continuando la ruta, recorrí la zona de Dimmuborgir, un gran campo de lava poblado por unas “construcciones” que son auténticas maravillas naturales. Son los famosos “Castillos negros”, que contemplé y “pateé”. Dos se llevan la palma: “La Iglesia”, con su hueco cilíndrico casi perfecto, a modo de gran rosetón, y la “Iglesia Gótica” (primera fotografía), con un magnífico arco puntiagudo de entrada y otro en la parte posterior, y entre ambos una amplia “nave central” y elevada cúpula. Y a lo largo de varios kilómetros hay “castillos negros” por doquier, y curiosas formaciones que son una auténtica delicia para la vista.

 

Las placas tectónicas y el “Volcán del Infierno”

Tras un pequeño tentempié en Dimmuborgir, seguimos a Grjótagia,donde aprecié nítidamente los efectos del choque de la placa tectónica de América con la de Euro-Asia. Una enorme y profunda grieta rocosa es la huella palpable, y en el interior de la elevación hay dos piscinas naturales de aguas calientes, una para hombres y otra para mujeres.

De allí me desplacé al Volcán Viti, un volcán de explosión que data de 1724 y que figura en la mayoría de los folletos. El volcán Viti, cuyo amplio y profundo cono está ocupado por un gran lago cubierto de algas, en el que hay diversas variedades de peces comestibles, es conocido también como el “Volcán del Infierno” ya que los antiguos habitantes de Islandia lo consideraban como la puerta de acceso al Averno.

Bajando la montaña llegamos a la zona geotérmica de Krafla, con su gran Central Geotérmica, yal bordeexiste un mirador natural desde el que se contempla en toda su belleza elLago Mývatn. Y tras comer en el restaurante “Kuika” atravesé el “Valle del humo” (por sus fumarolas), vi el Instituto más pequeño de Islandia (con solo cien alumnos) y “El río que tiembla”, que con 178 kilómetros es el más largo  de la isla.

 

La impresionante “Cascada de los Dioses” 

Sin duda alguna,el detenido recorrido porGodafoss, la “Cascada de los Dioses” (segunda fotografía), marcó un importante punto de inflexión. Es una de las cataratas más espectaculares de Islandia, aunque solo tiene 12 metros de altura y 30 de ancho. El origen del nombre data del momentoen que los pobladores adoptaron el cristianismo, y con tal motivo el jefe del clan arrojó al río en ese mismo lugar las figuras de los dioses e ídolos que adoraban.

02-Lateral-de-la-cascada-de-Godafoss

Desde la cascada de Godafoss me desplacé caminando hasta la de Geitafoss, que está en el mismo río y también es muy atractiva. Luego, por un puente peatonal pasé al otro lado del río, y después de tomar un refresco en la cercana cafetería emprendí el largo recorrido hasta la ciudad de Akureyri, bordeando el fiordo Eyjafjördurque con 60 km. es el más largo de Islandia.

 

Akureyri: parada y fonda

Tras atravesar un túnelque acorta mucho el recorrido, llegamos a Akureyri, la capital del Norte y una de las más bellas urbes de Islandia. Esuna ciudad de 8.000 habitantes, que estáal fondo del fiordo y es el lugar de trabajo de mi guía Örn.

03-Iglesia-Akureyri(1940)

Después de dejar el equipaje en el “Icelandair Hotel”recorrí a pie la ciudad, muy cómoda para caminar pues es totalmente llana, con grandes pistas de esquí en las nevadas y cercanas montañas. De esedetenido paseo destaco la IglesiaLuterana de 1940 (tercera fotografía), elrestaurante “Bauttin”, la calle peatonal llena de comercios y lugares de ocio, el típico “Café Akureyri”, la recoleta plaza principal, el Museo de Arte, el “Indian Curry Hut”, sus parques, y las estatuas y monumentosdel puerto yde la urbe.

Tras una reparadora cena, y después de revisar las fotografías del día y el video realizado, me acosté de inmediato ya que al día siguiente debería desplazarme 430 kilómetros hasta la capital, Reikiavik, con muy interesantes visitas y largas caminatasa lo largo del recorrido. (Fotos: Lajos Spiegel).

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