Después del partido visto en Riazor el pasado sábado donde el Depor fue capaz, por fin, de conseguir una victoria ante el colista, la permanencia está prácticamente conseguida a falta de ocho jornadas para terminar el campeonato.

Varias lecturas tiene el partido contra el Levante. Primero, permite romper con la inercia de derrotas y empates que tenía bloqueada a la platilla. En segundo lugar, supone descargar los nervios que hacían que los jugadores actuaran con dudas e imprecisiones.

Pronto es para echar las campanas al vuelo pero muy bien tendrían que darse las cosas a los equipos de abajo, diez en este momento, y muy mal a los coruñeses para no mantener la categoría en un año difícil que se está resolviendo con solvencia.

Sin perder de vista el calendario, habría que ir comenzando a diseñar el equipo de cara a la temporada que viene. Con el esquema del equipo apuntalado, toca mejorar el plantel y descartar a futbolistas que no han dado el resultado previsto.

Un jugador con contrato en vigor, Luisinho, parece que se auto descarta para el futuro. La falta de minutos es el motivo de la supuesta renuncia. Al margen de los problemas de principio de temporada -estuvo apartado del equipo-, y la llegada de Navarro para cubrir su puesto, el portugués ha demostrado compromiso y sus aportaciones han sido importantes en este curso.

En la portería hay que esperar la recuperación y posible renovación de Fabricio, un jugador que finaliza contrato y que tuvo varias ofertas que no se han llegado a concretar. Lux sigue siendo un valor seguro para defender el puesto.

Lopo poco ha contado para Víctor cuando lo ha necesitado debido a la baja de Sidnei. Rober sigue siendo una promesa al que le falta madurar posiblemente lejos de Riazor. Habrá que estar a la espera de la progresión de Insua que ha contado con minutos en un Leganés que lidera la división de plata. La baja de Manuel Pablo, pendiente la renovación de Lopo, y a la espera del desenlace de Luisinho, abre la línea defensiva a necesarias incorporaciones.

Mosquera, Borges y Alex han demostrado que son el eje del mediocampo coruñés. Tristemente quien no acaba de cuajar en la categoría es Juan Domínguez que ha tenido muy poca presencia en este curso.

El ataque ha vivido una excesiva dependencia de Lucas Pérez, sobre el que es previsible que lleguen ofertas. Luis Alberto, Faycal y Cartabria han aportado buenas cosas al conjunto mientras que Cani, intermitente debido a sus lesiones, ha sido un elemento que siempre aportó experiencia y buen juego. Del resto poco se les ha visto. Al margen de la continuidad de Lucas, urge reforzar el puesto de delantero goleador.

Primero asegurar la categoría y después, a ponerse a trabajar en renovaciones, bajas, cesiones y fichajes pensando en mejorar la plantilla para el año que viene.

 

@pgarcia_ramos

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