El viernes visita Riazor el Atlético de Madrid, un partido que irremediablemente estará marcado por la decisión de la Audiencia Provincial de Madrid de desestimar el recurso de apelación por la excarcelación de los cuatro presuntos culpables del asesinato del aficionado deportivista  hace apenas un año. La escasa, o casi nula, presencia de aficionados rojiblancos debido a jugarse un día de laborable, no impedirá que en el recuerdo de la afición esté presente ese luctuoso accidente. Es de esperar que todo se haga dentro de un orden pero desde el legítimo derecho a reclamar Justicia por el brutal asesinato que costó la vida a Jimmy.

En el aspecto deportivo llega el Atlético con la moral reforzada después del triunfo ante un flojo Valencia. Los colchoneros son terceros si bien ya han disputado sus encuentros contra los equipos más potentes, si atendemos a la clasificación de la temporada pasada (Barcelona, Real Madrid, Valencia, Sevilla y Villarreal). Hasta el final de la primera vuelta, teóricamente tienen un camino más fácil que los coruñeses.

Cholo Simeone amenaza con poner en el campo a los mismos hombres que ganaron el pasado domingo al cuadro valenciano. Sería la primera vez que repite alineación esta temporada. El ajuste a su sistema, más emocional que táctico, de los nuevos fichajes parece que está empezando a dar sus frutos. Jackson ya asoma su talento goleador y el belga Carrasco tiene además de regate y gol, un magnífico rendimiento a la hora de recuperar balones en medio campo. Si añadimos a Griezmann, quizá con Benzema el delantero más en forma del fútbol español, los atléticos manejan una delantera temible.

Nada nuevo en este conjunto que ha tenido la habilidad fichar a grandes especialistas en este puesto durante las últimas temporadas y el acierto de venderlos a precios millonarios. Sólo hay que recordar a Torres, Agüero, Forlán, Falcao, Diego Costa, grandísimos goleadores todos ellos que nutrieron de goles al Atlético esta última década.

También nos visitará un viejo conocido de la afición y al que se le sigue teniendo cariño en la ciudad: Filipe Luis. Riazor ha visto crecer a este lateral que triunfó más tarde en el Manzanares. Tras su decepcionante paso por el Chelsea a los órdenes del apesadumbrado Mourinho, vuelve al cuadro colchonero con ganas de demostrar que su paso por el equipo londinense fue un error.

En lo que se refiere al Deportivo, vuelve a escena tras su tropiezo en Málaga. Un paso atrás no tanto por el resultado como por la sensación que dejó en el campo. Este año estamos acostumbrados a ver a un equipo que lucha y busca la victoria pero en la Rosaleda no salieron las cosas bien. Víctor duda en el dibujo que presentará el viernes. Si un esquema más alegre con un 4-4-2 o decidirse por un 4-5-1 que busque la contención y el contrataque. Sin duda el partido ante los colchoneros es una buena oportunidad para saber la dimensión de este nuevo equipo que por lo visto hasta ahora, tiene a la afición muy ilusionada. Cualquier resultado que nos sea perder permitiría mantener el buen rendimiento que están mostrado los blanquiazules esta temporada.

pgarcia_ramos@hotmail.com

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