Hacía años que no tenía noticias directas del prestigioso abogado y político Manuel Murillo. La última vez que nos vimos fue el 12 de abril del 2003, con motivo de una reseña que publiqué en mi sección “Torre de Cristal”, de “El Ideal Gallego”. Por eso me alegré al recibir la invitación para asistir a la presentación de su libro “En la prórroga de la vida”, que se celebró en el Colegio Provincial de Abogados de La Coruña. El salón de actos estaba atestado (nada que ve con un juicio …), y el grato y animado encuentro fue presidido por Tuto Pérez-Cepeda, presidente de la institución. El libro es un relato, en primera persona, del drama sufrido por la familia de Murillo durante la Guerra Civil Española, y sus secuelas posteriores. Por cierto, Murillo y yo, además de coincidir en algunos aspectos ideológicos, también coincidimos en lo de la “Prórroga de la vida”, ya que desde hace cuatro años celebro el 30 de diciembre una gran fiesta para conmemorar mi “Prórroga vital”…. De la solapa del libro, extraigo lo siguiente: “El autor ha sido testigo de excepción y hasta protagonista de la historia de nuestro país de las últimas ocho décadas. El relato de los primeros años de su vida, aunque parece propio de una novela, refleja, con todo su dramatismo, la vida de los perdedores de la Guerra Civil. Ya en la Transición sale a relucir su indomable espíritu republicano y socialista y se afilia, en la clandestinidad, al PSOE que lideraba Rodolfo Llopis. Fueron años duros y apasionantes. Murillo abandona su profesión de abogado y se dedica en cuerpo y alma a la política, a la conquista de la libertad y de la democracia. De vuelta a la abogacía, interviene en los casos más importantes y más mediáticos que se han ventilado en los juzgados españoles en los últimos 40 años. Es memoria vida de nuestra historia más reciente, y de esto trata el libro”. Casi nada, vamos. (Foto: Lajos Spiegel)

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